Por Kerri M. Winters-Stone, Sydnee Stoyles, Nathan Dieckmann, Elizabeth Eckstrom, Shiuh-Wen Luoh, Fay Horak, Eric J. Roeland y Fuzhong Li
Resumen
Objetivo
Determinar si el entrenamiento de fuerza o el tai ji quan pueden reducir la fragilidad en mujeres posmenopáusicas mayores tratadas con quimioterapia para el cáncer.
Métodos
Realizamos un análisis de datos secundarios de un ensayo controlado aleatorio, simple ciego, de tres brazos en el que mujeres posmenopáusicas de mayor edad (50+ años) sobrevivientes de cáncer fueron asignadas al azar a programas de ejercicios grupales supervisados: tai ji quan, entrenamiento de fuerza o control de estiramiento para 6 meses.
Evaluamos la fragilidad mediante un modelo de 4 criterios que consiste en debilidad, fatiga, inactividad y lentitud. Mediante regresión logística, determinamos si el fenotipo de fragilidad (prefragilidad o fragilidad) disminuyó después de la intervención, cuántos y cuáles criterios de fragilidad disminuyeron y qué características identificaron a las mujeres con mayor probabilidad de reducir la fragilidad.
Resultados
Se utilizaron datos de 386 mujeres que completaron las pruebas iniciales y de 6 meses (edad media de 62,0 ± 6,4 años).
Las probabilidades de mejorar el fenotipo general de fragilidad durante 6 meses fueron significativamente mayores en el grupo de entrenamiento de fuerza en comparación con los controles (OR [IC del 95%]: 1,86 [1,09, 3,17]), pero no para el tai ji quan (1,44 [0,84, 2,50] ]).
Tanto el entrenamiento de fuerza (OR 1,99 [1,10, 3,65]) como el tai ji quan (OR 2,10 [1,16, 3,84]) condujeron a probabilidades significativamente mayores de reducir ≥1 criterio de fragilidad en comparación con los controles.
El entrenamiento de fuerza condujo a una reducción de tres veces en la inactividad (p <0,01), y el tai ji quan a una reducción de dos veces en la fatiga (p = 0,08) versus el control. Un IMC inicial más alto, una puntuación de comorbilidad y un estado de fragilidad caracterizaron a las mujeres con mayor probabilidad de reducir la fragilidad que otras mujeres.
Conclusiones
El entrenamiento de fuerza parece superior al tai ji quan y al estiramiento con respecto a la reducción del fenotipo general de fragilidad entre las mujeres posmenopáusicas tratadas con quimioterapia para el cáncer, pero el tai ji quan afectó favorablemente el número de criterios de fragilidad.
Implicaciones para los sobrevivientes de cáncer
El entrenamiento grupal supervisado que enfatiza el entrenamiento de fuerza y/o el tai ji quan puede ayudar a combatir el envejecimiento acelerado y reducir la fragilidad después del tratamiento del cáncer.
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Fuente: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC10602129/
